El cliente requería minimizar al máximo los riesgos de seguridad y control de versionamiento de sus plataformas tecnológicas, para evitar la pérdida de disponibilidad de sus aplicativos por algún hackeo y reducir el descontrol de versiones en los más de 600 ambientes con que cuenta.  

Desafío: 

Lograr implementar una plataforma centralizada que permita tener sus Sistemas Operativos Linux actualizados y no perder el control en el proceso de actualización de 600 servidores, evitando que toda liberación en los sistemas productivos sea probada con ambientes homologados.